A Ponga la encontramos en un polígono industrial a punto de dar a luz. y en muy malas condiciones. Tuvo 10 cachorros que consiguió sacar adelante perfectamente y fueron todos adoptados menos ella. Por su anterior vida, tiene un ojito ciego (el oftalmólogo piensa que es de algún traumatismo que tuvo hace mucho tiempo pero no necesita tratamiento ni nada en especial) hace su vida totalmente normal, es super súper súper cariñosa, simpática, en el coche va de maravilla, pasea perfectamente y es sociable con otros perros y con gatos.